3/18/2010

Pedofilia o votación recursiva

Advertencia: Este texto puede herir la sensibilidad del lector. A mí no me gustan todos mis pensamientos, pero prefiero sucumbir a la sabiduría interior, que a la lactancia exterior.

Siempre me suelen hacer gracia las muestras de rebeldía humanas, sobre todo aquellas sin la más mínima reflexión. Hoy fui a una de las webs que frecuento para masturbarme, en ella había un video llamativamente votado, y decidí ojearlo. En cuestión, solo eran letras sin imágenes, con frases denigrando a la pedofilia de forma hipócritamente amable, y despectivamente desagradable. Curiosamente, mucha gente daba su apoyo (literalmente virtual en ambos sentidos) y centraban su odio en un solo escenario. ¿Cuál es la finalidad de este objetivo? Se podrían dividir a los pedófilos en 4 secciones:
El potencialmente pedófilo: Seguramente casi todos los hombres estamos en ese rango, en mayor o menor escala de edades, es potentísimo el efecto que produce la juventud en nuestra sexualidad.
El pedófilo intrusivo: El pedófilo potencial pasó la fina línea, y es aquí donde encuentra un mundo hipócrita, cargado de tentaciones y desprecios, la ropa se evapora, dejando al descubierto las filias tentadoras de las miradas, los países ofrecen turismo sexual, o las masas, lapidan verbal, legal y físicamente esas acciones ornamentalmente potenciadas. Este pedófilo solo siente miedo y culpa, y cree ser un monstruo social por no poder evitar sus pensamientos, pero si acciones, contenidas por el material pornográfico que circula en los medios.
El pedófilo que esconde la mano y tira piedras: Este, ejerce delitos como turismo sexual, y ve películas y fotos. Castra sus acciones al límite de la ley anónima, donde es fácil pasar desapercibido. Seguramente, sus frenos sean la moralidad social y legal.
El pedófilo sin escrúpulos: Llegar a este punto, debe ser difícil, y presupongo que la mayoría son víctimas participativas del sistema económico, donde yo no veo la diferencia de mal, en filmar o encular a un niño, a dejar a 10 padres de familia sin empleo y ayudas, o hacer firmar a alguien una hipoteca de 40 años, sabiendo previamente que condenará a la esclavitud a la mayoría de personas.
Hay alguien más sabio que cualquier humano terrenal, y ese es nuestro diseñador, la naturaleza. La especie humana, hace 10.000 años, no aspiraba a vivir más de 2 o 3 décadas, uno ya era un sabio anciano a los 25, y físicamente apenas hemos cambiado, probablemente nuestros ancestros ( y no tan remotos), copulaban con 10 años, ya lo son hoy entre los 10 y 16, con media en los 13, aunque hace 150 años, llegaba la primera regla (menarquía) a los 16 o 17, depende en gran medida de la alimentación, forma física y genética, es decir, cuando el cuerpo está preparado. El sexo no es un acto pecaminoso o sucio, es un acto natural y básico para la plenitud de todo ser. Pero por alguna extraña razón, limitamos el sexo a una edad genética y preconcebida, a los llamados “menores”. Hasta contar como funciona la sexualidad, es un tema conflictivo y difícil para muchos padres. Es éticamente inmoral, ocultar y prohibir los placeres de la existencia, a los que consideramos inferiores, simplemente por tener una ventaja jerárquica en “conocimientos” (condicionamientos) y poder adquisitivo (en la sociedad el hecho de existir, no prevalece sobre la capacidad adquisitiva). Otro tema distinto, es la manipulación y engaño, que puede hacer un adulto sobre un menor, y debido a esa extorsión, se crean o potencian problemas psicológicos y/o físicos. Determinar la edad mental es mucho más complejo que hacer un corte por edades, y así como la publicidad es legal a todas las edades; quizás podría tratarse como una droga adictiva, al igual que el problema del tabaco, bebidas con alta graduación y estimulantes, no es el contenido base, si no el añadido adictivo y alterador de la percepción, el alcohol, la nicotina, la cafeína, el azúcar (en cantidades insultantes) y demás derivados perjudiciales. Los países tienden a usar la moralidad imperante, en base a lo que interesa en ese momento, y las ovejas negras sociales siempre son un buen respaldo a la hora de unificar pensamientos masivos.
Cuando se lucha contra algo, si no se hace de forma correcta, se consigue un resultado negativo o mas inercia, si prohibimos cosas a una mente joven, tiende a querer probarlo, y si criticas o dices “NO” públicamente a una actitud, se consigue publicidad morbosa y sentimientos destructivos hacia una persona que quizás ha deseado, y no manipulado a “menores”. Nadie tiene la culpa de sus gustos sexuales y filias, si hay una responsabilidad cívica ante nuestros semejantes, la discriminación a la criminación no deja de ser una incriminación.
Creo que es un tema exclusivo a las autoridades competentes, que podrían ejercer su trabajo, sin importar si los políticos necesitan votos o cortinas de humo, o las frustraciones sociales nacientes de un sistema explotador de minas mentales ricas en mano de obra barata. Es muy fácil culpar al turismo sexual, pero… ¿Acaso les hemos dado esos niños una mejor opción para poder cenar esa noche? Piénsalo antes de meter una boca mas a este mundo, en vez de tomar una decisión porque tu mundo esta vacio.