Darwin o los infortunios de una galleta

Sérase una vez, en un futuro no muy lejano, donde las radiaciones reinaban y la mayoría de especies habían sido sustituidas por extrañas mutaciones, una galleta. María, vivía sola en una biblioteca, devoraba libros ansiosa, soñaba con encontrar otros mundos poblados de fantásticas criaturas. Su libro preferido era “Los Viajes de Gulliver”. Cerró el último libro por leer, en manual de lavadoras. Decidió construir un submarino con una lata de pepinillos, que olía raro pero era funcional. Domesticó a unas trufas salvajes y las obligó a remolcar el artefacto hasta la playa. Navegó varios días a la deriva, sorteando peligrosos bancos de sardinas, hasta que embarrancó en una isla desierta. Ya de madrugada, se tropezó con un canuto relleno.Y el amor surgió entre la harina, tan esponjoso y caliente como un bollo recién horneado. La noche cubrió sus levaduras. Ella lo llamó Napoleón, él era mudo. -Es tan dulce como mi abuela merengue, era tan tierna... se casó con un bizcocho mojado, lo llamaban Borrachín.Su romance fue breve. Una mañana fueron atacados por una grotesca tribu de obleas rociadas de azucar glasé, armada con raspas de pescado. Sólo el sacrificio de Napoleón le permitió salir huyendo, con sus lágrimas derramando cielos, mientras su amante era devorado por mil ñam ñams. Nunca supo de qué estaba relleno. Cayó rodando en su huída y mientras el mundo a su alrededor giraba, se abrieron las páginas de todos los libros que había leído, y se postraron las hojas en infinitos horizontes, asimiló toda la información recopilada por los seres humanos durante miles de generaciones: allí estaba el significado de la vida, explicado en el todo.-La verdad del cosmos, realidad de mi existencia, el sentido de mi consciencia, es que sólo soy una galleta.Las hordas de obleas le dispararon dátiles por la espalda con un tirachinas y atravesaron su vientre-Ahora, soy una rosquilla.


Moraleja: Hace falta mucho amor para crear a una galleta, y un tirachinas para hacerla aun rosquilla.


Moralejas:
Hacen falta millones de años de evolución para crear una galleta.Del idealismo al hecho hay un trecho.A veces para progresar, hay que perder.