La importancia de parecer mujer
Astronauto: Güinston tenemos un problema
Güinston: Diga me.
Astronauto: Hemos pinchado una rueda y estamos a punto de aterrizar en Marte.
Güinston: ¿Cómo se puede pinchar una rueda en el espacio? Es igual, sake un fuelle de la capota.
Astronauto: ¿Cómo se puede hinchar una rueda sin aire en el espacio? Es igual, salgo fuera a hincharla.
Astronauto: ¡Estamos aterrizando y sigo fuera!
Güinston: ¡Agárrese a algo hombre de Dios!
Astronauto cogiendo un faro trasero: ¡Oki doki!
Nave impactando en la pelusilla del suelo a velocidad supersónica: ¡Clonk!
Astronauta con el traje chamuscado y negro: ¡Ya “toy” aquí! Desconecto transmisión.
La sombra de una roca se volvió redondeada, el polvo bermellón bailaba en el silencio, una figura verde rompía la roja monotonía.
Astronauto: ¡Coño! ¡Hay vida en Marte!
Silueta verde con forma de mujer: No, soy de la luna, pero me mude a Marte.
Astronauto: ¡Encima habla!
Acuarela verde acercándose: Hablas y actúas como un tipo que conocí hace unos 40 años, solo que él iba de blanco.
Astronauto: ¿Un tipo muy “salao”?
Mujer bajita, gordita, con el pelo rizado y cariñosamente atractiva: Si, ¿le conoces?
Astronauto: Claro, es Neal, un cachondo. ¿Cómo te llamas?
Noelia: Noelia, parecía majo, me conto una historia de un tal Sr.Gorsky.
Astronauto: ¿No era su vecino?
Noelia: Si, se ve que un día de pequeño coló una pelota a su casa y fue a buscarla.
Astronauto: ¿Y…?
Noelia: Oyó como la Sra.Gorsky gritaba // Sra.Gorosky: ¿Sexo oral? ¡¿Quieres sexo oral?! ¡Tendrás sexo oral cuando el hijo del vecino caminé por la luna!
Astronauto: ¿Eso es cierto?
Noelia: Yo pregunté lo mismo, hasta que años más tarde lo encontré por internet. He de ir a buscar al niño al cole.
Astronauto: Eres muy graciosa, ¿Estas casada?
Noelia: Soltera, me voy, un placer.
Astronauta: Estaré un tiempo por aquí, he de llenar la nave de piedras, Espero volverte a ver.
El astronauta fue hacia la nave, cogió la pala y una carretilla y se fue en busca de piedras de formas extrañas y enigmáticas
Astronauto .oO0( hoy solo cogeré piedras con forma de cruasán)
Después de la dura jornada, ceno junto a un par de androides que viajaban con él.
Astronauto: Hoy conocí una chica muy maja.
Androide RT-Tos: Tse Tse bip bip, que dices, estamos a una distancia muy lejana a la tierra.
Astronauto: Iba desnuda, era verde, y tenía 3 tetas, aunque muy bonitas.
Androide P-ta-z: Psss psss bip bip, estas flipando,¿ ya te has vuelto a dar el “filetazo” con una piedra?
Astronauto: Que sabréis los androides de esto... uno que perdió la virginidad con una gameboi y el otro tiene 3 hijos con una vatitaurus
Androides: Bip bip
El astronauta se fue a recoger caracoles marcianos, piedras y polvo al planeta, como cada mañana
Astronauto: ¡La, la la!
Noelia: Porrom pom pero.
Astronauto: Ah hola, ¡eres tú!
Noelia: Marte está muerto, no hay nadie más.
Astronauto: Supongo que tienes razón, Sabes, el otro día me gusto tu compañía, podríamos ir a cenar y a ver una peli a mi nave. Y si la cosa va bien, quien sabe...
Noelia: No, y… ¡mil veces no!
Ella se fue corriendo ante la atónita mirada del astronauta, el se fue a la nave, y montó un cochecito espacial, y se fue a buscarla, al cabo de un par de horas consiguió dar con ella, estaba sentada en una roca, llorando desconsolada.
Astronauto: ¿Qué te pasa mujer? no es para tanto.
Noelia con un moco llorando lágrimas lilas: Si, si lo es, ¡Todos los astronautas sois iguales!
Astronauta sacándose un clínex de la manga del traje: Toma sécate, y cuéntame que te pasa.
Noelia: Pues que una, se arregla, se pone guapa, crea sus sueños, y viene un astronauta, y lo destruye todo.
Astronauto: Yo solo quería conocerte.
Noelia: Si, y luego, mas tarde, seducirme, y llevarme a tu habitación gravedad 0.
Astronauto: ¿Y que tendría eso de malo?
Noelia: Prometer y prometer hasta meter, y una vez metido, olvidar lo prometido.
Astronauto: ¿A donde quieres ir a parar?
Noelia: Tu amigo Neil, cuando vino a la luna.
Astronauto: Aja.
Noelia: Comenzó a tontear conmigo, y me robo el corazón, y no paró hasta acostarnos juntos.
Sollozo de mujer.
Noelia: Luego dijo que iba a x tabaco, y se fue en su nave y jamás regreso.
Moco.
Noelia: ¡Hace 40años que el hombre no pisa la luna! Me quede embarazada, y me vine a vivir a Marte.
Astronauto: ¿Y eso que tiene que ver conmigo?
Noelia: Es fácil, para ti seré el rollo de unos días, y cuando tengas tus piedras y tu entrepierna te irás. Pero los sentimientos quedan y queman, y paga la pena… ¿Que pases un rato agradable y yo muchos que no lo sean?
El astronauta se giro, intento rascarse la perilla, pero la escafandra no le dejaba. Miro al horizonte, al universo, y a su interior. Después de unos minutos concluyo.
Astronauto: He cruzado miles de kilómetros, y no se cruzarme de pernas, tienes razón Noelia, las cosas están bien así.
Noelia le beso, y cuando los dos entendieron las necesidades del otro, se acostaron juntos en la sala de gravedad 0. Noelia empezó a confiar en él, cuando se entero que su astronauta no fumaba, y repoblaron Marte con seres pequeñitos con antenas y 2 penes y 3 tetas.
Güinston: Diga me.
Astronauto: Hemos pinchado una rueda y estamos a punto de aterrizar en Marte.
Güinston: ¿Cómo se puede pinchar una rueda en el espacio? Es igual, sake un fuelle de la capota.
Astronauto: ¿Cómo se puede hinchar una rueda sin aire en el espacio? Es igual, salgo fuera a hincharla.
Astronauto: ¡Estamos aterrizando y sigo fuera!
Güinston: ¡Agárrese a algo hombre de Dios!
Astronauto cogiendo un faro trasero: ¡Oki doki!
Nave impactando en la pelusilla del suelo a velocidad supersónica: ¡Clonk!
Astronauta con el traje chamuscado y negro: ¡Ya “toy” aquí! Desconecto transmisión.
La sombra de una roca se volvió redondeada, el polvo bermellón bailaba en el silencio, una figura verde rompía la roja monotonía.
Astronauto: ¡Coño! ¡Hay vida en Marte!
Silueta verde con forma de mujer: No, soy de la luna, pero me mude a Marte.
Astronauto: ¡Encima habla!
Acuarela verde acercándose: Hablas y actúas como un tipo que conocí hace unos 40 años, solo que él iba de blanco.
Astronauto: ¿Un tipo muy “salao”?
Mujer bajita, gordita, con el pelo rizado y cariñosamente atractiva: Si, ¿le conoces?
Astronauto: Claro, es Neal, un cachondo. ¿Cómo te llamas?
Noelia: Noelia, parecía majo, me conto una historia de un tal Sr.Gorsky.
Astronauto: ¿No era su vecino?
Noelia: Si, se ve que un día de pequeño coló una pelota a su casa y fue a buscarla.
Astronauto: ¿Y…?
Noelia: Oyó como la Sra.Gorsky gritaba // Sra.Gorosky: ¿Sexo oral? ¡¿Quieres sexo oral?! ¡Tendrás sexo oral cuando el hijo del vecino caminé por la luna!
Astronauto: ¿Eso es cierto?
Noelia: Yo pregunté lo mismo, hasta que años más tarde lo encontré por internet. He de ir a buscar al niño al cole.
Astronauto: Eres muy graciosa, ¿Estas casada?
Noelia: Soltera, me voy, un placer.
Astronauta: Estaré un tiempo por aquí, he de llenar la nave de piedras, Espero volverte a ver.
El astronauta fue hacia la nave, cogió la pala y una carretilla y se fue en busca de piedras de formas extrañas y enigmáticas
Astronauto .oO0( hoy solo cogeré piedras con forma de cruasán)
Después de la dura jornada, ceno junto a un par de androides que viajaban con él.
Astronauto: Hoy conocí una chica muy maja.
Androide RT-Tos: Tse Tse bip bip, que dices, estamos a una distancia muy lejana a la tierra.
Astronauto: Iba desnuda, era verde, y tenía 3 tetas, aunque muy bonitas.
Androide P-ta-z: Psss psss bip bip, estas flipando,¿ ya te has vuelto a dar el “filetazo” con una piedra?
Astronauto: Que sabréis los androides de esto... uno que perdió la virginidad con una gameboi y el otro tiene 3 hijos con una vatitaurus
Androides: Bip bip
El astronauta se fue a recoger caracoles marcianos, piedras y polvo al planeta, como cada mañana
Astronauto: ¡La, la la!
Noelia: Porrom pom pero.
Astronauto: Ah hola, ¡eres tú!
Noelia: Marte está muerto, no hay nadie más.
Astronauto: Supongo que tienes razón, Sabes, el otro día me gusto tu compañía, podríamos ir a cenar y a ver una peli a mi nave. Y si la cosa va bien, quien sabe...
Noelia: No, y… ¡mil veces no!
Ella se fue corriendo ante la atónita mirada del astronauta, el se fue a la nave, y montó un cochecito espacial, y se fue a buscarla, al cabo de un par de horas consiguió dar con ella, estaba sentada en una roca, llorando desconsolada.
Astronauto: ¿Qué te pasa mujer? no es para tanto.
Noelia con un moco llorando lágrimas lilas: Si, si lo es, ¡Todos los astronautas sois iguales!
Astronauta sacándose un clínex de la manga del traje: Toma sécate, y cuéntame que te pasa.
Noelia: Pues que una, se arregla, se pone guapa, crea sus sueños, y viene un astronauta, y lo destruye todo.
Astronauto: Yo solo quería conocerte.
Noelia: Si, y luego, mas tarde, seducirme, y llevarme a tu habitación gravedad 0.
Astronauto: ¿Y que tendría eso de malo?
Noelia: Prometer y prometer hasta meter, y una vez metido, olvidar lo prometido.
Astronauto: ¿A donde quieres ir a parar?
Noelia: Tu amigo Neil, cuando vino a la luna.
Astronauto: Aja.
Noelia: Comenzó a tontear conmigo, y me robo el corazón, y no paró hasta acostarnos juntos.
Sollozo de mujer.
Noelia: Luego dijo que iba a x tabaco, y se fue en su nave y jamás regreso.
Moco.
Noelia: ¡Hace 40años que el hombre no pisa la luna! Me quede embarazada, y me vine a vivir a Marte.
Astronauto: ¿Y eso que tiene que ver conmigo?
Noelia: Es fácil, para ti seré el rollo de unos días, y cuando tengas tus piedras y tu entrepierna te irás. Pero los sentimientos quedan y queman, y paga la pena… ¿Que pases un rato agradable y yo muchos que no lo sean?
El astronauta se giro, intento rascarse la perilla, pero la escafandra no le dejaba. Miro al horizonte, al universo, y a su interior. Después de unos minutos concluyo.
Astronauto: He cruzado miles de kilómetros, y no se cruzarme de pernas, tienes razón Noelia, las cosas están bien así.
Noelia le beso, y cuando los dos entendieron las necesidades del otro, se acostaron juntos en la sala de gravedad 0. Noelia empezó a confiar en él, cuando se entero que su astronauta no fumaba, y repoblaron Marte con seres pequeñitos con antenas y 2 penes y 3 tetas.